La princesita Camila y la mariposa encantada.

En el reino de los montes regios donde sobresalen hermosos paisajes de montaña y verdes praderas, se encuentra una pequeña villa, ahí entre casas antiguas y caminos sinuosos emerge un gran castillo custodiado por una fiera mitad perro y mitad lobo, es el mas fiel guardián que protege la entrada y aleja a los animales salvajes que en ocasiones bajan de la sierra en busca de alimento y agua. “Lobo” lo llaman sus amos, dicen que el rey que posee esas tierras llego de un lejano país hace muchos años y junto con su esposa la reina del rincón se establecieron ahí, los aldeanos los recibieron gustosos porque se vieron conquistados por la dulzura y belleza de su hija Camila la princesita, un niña que alegraba su hogar y a todas las personas que la conocían, poseía un rostro de grandes ojos iguales a los de su mama, pero lo que mas sobresalía era su tierna sonrisa con la que conquistaba el corazón de todo aquel que la miraba, siempre estaba ataviada con fascinantes vestiditos y zapatillas que le hacían lucir preciosa, Camila como todas las niñas de su edad jugaba y cantaba todo el día, pero lo que mas le gustaba hacer, era jugar en los jardines persiguiendo a las mariposas, nunca las agarraba pues sabia que si sus deditos llegasen a tocarlas sus alitas se romperían y quedarían indefensas sin poder volar, por lo que era muy cuidadosa con ellas, un día jugando en uno de los jardines del castillo encontró una mariposa muy grande de colores tan brillantes como jamás había visto, Camila correteo tras su voladora amiga que parecía saber que era parte del juego pues no se alejaba tanto de la princesita y en cuanto se le acercaba daba unos cuantos aleteos para seguir la ronda. Otro día mientras la princesita jugaba con un sapo verde al que llamaba “amigo Buzz” imitando sus saltos y haciendo sonidos raros con su voz “croac croac” y reía al oírse a si misma, el sapito brinco y brinco hasta salir del castillo y Camila lo seguía saltando y diciendo “croac croac” sin darse cuenta que iban por la vereda que llevaba al bosque de los “osos malos” pues así lo llamaban los aldeanos porque en épocas de calor los osos que habitaban el bosque eran peligrosos, camila y su verde amigo seguían internándose en el bosque mientras que en el castillo ya extrañaban a la princesita, al pasar algunas horas sin tener noticias de ella, el rey y un grupo de hombres de la villa siguieron las huellas que dejaban las pequeñas zapatillas de la princesita, la noche se acercaba y Camila empezó a tener miedo porque no sabia como regresar, “amigo buzz” le decía al sapito ¿como regresaremos al castillo? Tengo miedo, el batracio la miraba como queriéndole decir “no tengo idea princesa”, no cabía duda, ambos estaban extraviados, a lo lejos se oía como los enormes osos bajaban de la montaña al bosque y eso pondría en riesgo a la pequeña, de pronto apareció aquella mariposa grande y de colores brillantes, se acerco a la princesita y aleteo para llamar su atención, mira!! Es mi amiga la mariposa dijo Camila y parece que quiere que la sigamos…vamos amigo Buzz! Y así la mariposa parecía guiar a la princesita de regreso al castillo y en pocos minutos se encontraron con el rey y la gente que la buscaban desesperadamente, su papa la tomo en sus brazos y le dijo….Camila nunca te vuelvas a salir del castillo sin avisar, porque te puedes perder… todos juntos regresaron al castillo y ahí la reina que estaba angustiada al ver que ya había vuelto la abrazo y le dijo…Camila hijita que susto nos diste!! Perdón mami, no volveré a salirme del castillo sola, pero sabes? Mi amiga la mariposa me enseño el camino para regresar, gracias a ella encontré a mi papi. la mariposa aun estaba cerca de Camila y la gente que estaba viendo la escena empezó a correr el rumor de que la mariposa era en realidad una buena mujer que había sido encantada por una hechicera que la transformo en mariposa y desde entonces se dedico a cuidar a la princesita Camila y a su amigo Buzz.
Con mucho cariño para mi sobrina Camila Ortega Rincón, te quiero mucho princesita!!!Tio Lalo…
Autor: Eduardo Perez Valencia

Para vos con todo mi cariño princesa

y que te sigas recuperando muy bien tqm.

Besitosss Sandra.